0 2 min 2 semanas

El peronismo celebró en otro domingo de votaciones -en un año electoral extenso y fatigoso- victorias previsibles que confirmaron una tendencia: los oficialismos provinciales ganan, mientras la imagen del gobierno nacional cae empujado por la inflación y la inestabilidad. Así, el Frente de Todos se fortaleció, se encendieron señales de alarma para Juntos por el Cambio y los libertarios de Javier Milei estuvieron ausentes de la competencia o quedaron muy relegados.

En Salta, donde triunfó Gustavo Sáenz; La Pampa, que reeligió a Sergio Ziliotto; y Tierra del Fuego, donde arrasó Gustavo Melella, estuvieron habilitados para votar cerca de 1.500.000 personas, 4,30% del padrón nacional. También fueron a las urnas, aunque en unos comicios parciales por la cautelar de la Corte Suprema, unos 500 mil sanjuaninos, que representan otro 1,69% del universo total de argentinos habilitados para elegir presidente.

En total fueron ocho las provincias que eligieron hasta hoy gobernador y en todas ganaron los oficialismos, con una excepción que en realidad confirma la regla: en Neuquén ganó Rodolfo Rolo Figueroa, un disidente del gubernamental MPN, que en realidad derrotó en una interna a cielo abierto el caudillismo atávico del clan Sapag.

En diálogo con InfobaeFederico Aurelio (Aresco-Julio Aurelio); Sergio Berensztein (Berensztein®); y Shila Vilker (TresPuntoZero) analizaron los resultados de las elecciones en las cuatro provincias, donde se impusieron con comodidad los oficialismos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *